Fiesta: 15 de Octubre

Teresa nació en 1515 en Ávila y demostró a temprana edad que era una persona inteligente y considerada. Teresa y su hermano Rodrigo, no participaban en los mismos juegos que los otros niños jugaban. Preferían, en cambio, ir al jardín y leer. Estaban más interesados ​​en la lectura de la Biblia y en la vidas de los santos.

Les fascinaban más la vida de los santos. La idea de la santidad les fascinaba. Les parecía a ellos que los santos estarían en la presencia de Dios por siempre. En su modo infantil, corrían por el jardín cantando, “por siempre, por siempre, por siempre.”

Cuando tenía 16 años de edad, Teresa fue enviada a vivir a un convento, ya a los 21 años, decidió hacerse monja. Disfrutaba su vida allí y empezó a darse cuenta de que había recibido un don especial. Era capaz de ver visiones celestiales. Relató estas visiones en sus escritos. Una de esas visiones vino en la forma de un ángel que lleva una larga lanza de oro que se apareció a Teresa. El ángel era sonriente y delicado por eso no asustó a Teresa. El ángel le arrojó la lanza en el corazón a Teresa. En lugar de sentir dolor, Teresa se ​​sintió seguridad y paz. La lanza no era una lanza, era el amor de Dios. Cuando la visión pasó, Teresa se ​​sentía muy cerca de Dios.

Teresa hizo muchas cosas buenas. Sabía orar y mucha gente quería aprender de ella. Escribió libros para ayudar a la gente. La gente todavía lee esos libros hoy. Ella fundó el convento San José, cuyo objetivo era permanecer en una vida sencilla de oración. Otras órdenes religiosas se opusieron a ella y le hicieron la vida difícil. Pero con el tiempo sus ideas se extendieron por toda España y en otras partes de Europa. Ella fue la fundadora de las Carmelitas Descalzas.

Murió en 1582 a la edad de 67 años y fue hecha santa en 1622. En 1970, fue nombrada Doctora de la Iglesia por sus escritos y enseñanzas acerca de la oración. Este fue un gran honor, especialmente para una mujer de su tiempo.

Santa Teresa, también conocida como Santa Teresa de Jesús, es la patrona de las personas que sufren de dolores de cabeza.

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Grado 4, capítulo 8
Grado 6, capítulo 7